Credo.


De pronto uno se aleja
de las imágenes queridas

amiga
quedás frágil en el horizonte
te he dejado pensando en muchas cosas
pero ojalá pienses un poco en mí

vos sabes
en esta excursión a la muerte
que es la vida

me siento bien acompañado
me siento casi con respuestas
cuando puedo imaginar que allá lejos
quizá creas en mi credo antes de dormirte
o te cruces conmigo en los pasillos del sueño

está demás decirte que a esta altura
no creo en predicadores
ni en generales
ni en las nalgas de miss universo
ni en el arrepentimiento de los verdugos
ni en el catecismo del confort
ni en el flaco perdón de dios

a esta altura del partido
creo en los ojos y las manos del pueblo en general
y en tus ojos y tus manos en particular.


Mario Benedetti


bon voyage, madamoiselle amsterdam

Compañeros de Ruta